Se dice que en el momento que escuchemos al cuco cantar habrá empezado la primavera. Ya sabes, esa estación que la sangre altera. Por que… ¡Cómo nos gusta la primavera!. Disfrutar de ese verde intenso del Campo de Argañán bajo un sol que todavía no calienta demasiado. Pasear entre las encinas que florecen, preparándose para dar su fruto, las bellotas, ya hacía octubre. La verdad es que nadie podrá negarnos que, si sólo nos fijamos en la naturaleza, la primavera es una de las estaciones más bonitas del año. Sin menospreciar el otoño, claro.
Pero, a la vez, a la primavera, también se la conoce como entretiempo. Es esa época en la que no hace ni frío ni calor. Ideal para comenzar a comer platos más fresquitos a la vez que aún hay días en los que apetece un platito caliente de esos que reconstruyen el alma.
Y con esta última reflexión en mente, hemos querido proponeros cinco recetas de entretiempo, de primavera, que están para rechupetearse los dedos.
Por eso, queridos lectores y lectoras… ¡A cocinar se ha dicho!
Alcachofas con jamón ibérico.
Es tiempo de Alcachofas. Entonces, imagina… ¿Qué crees que provocará un salteado de jamón ibérico, ligeramente salado, a ese retrogusto dulce que nos deja en boca la alcachofa? Lo sabemos, se te está haciendo la boca agua y con razón.
En Gastronomía&Cía proponen la receta de toda la vida, pero en modo tapa. Nos ha parecido buena idea. Un entrante ligerito, tradicional y con sabor. Puedes ver la receta completa aquí.
Tosta de Bimi con Jamón Ibérico.
¿Conoces el bimi o broccolini? Es una nueva variedad de hortaliza fruto del cruce natural entre el brócoli y la col china. Se parece al brócoli, pero tiene un tallo más largo y delgado, con un sabor que nos recuerda a los espárragos verdes. Además, es rico en vitaminas y sales minerales. Además, contiene más ácido fólico, antioxidantes y vitamina C que los espárragos o las espinacas.
Y al igual que a Miriam de JamónLovers a nosotros también nos parece una estupenda idea sumar a todas estas propiedades las del jamón ibérico de bellota. Y así, conseguimos un plato sano y sanísimo.
Ensalada de calabacines y jamón ibérico con aderezo agridulce.
A las puertas del verano no podía faltar una ensalada. Pero como aquí somos un poco locos, nos hemos querido salir ligeramente del tiesto y proponerte una que no lleva ni lechuga, ni tomate, ni cebolla. De hecho, no lleva ningún ingrediente típico cuando alguien te habla de una ensalada.
Y ésta receta de Directo al Paladar es la que te recomendamos para esos días en los que ya empieza a calentar el sol y pero en los que, por lo que sea, rhttp://www.directoalpaladar.com/recetas-de-ensaladas/calabacines-a-la-plancha-con-jamon-iberico-receta?utm_content=buffer3cf56&utm_medium=social&utm_source=twitter.com&utm_campaign=bufferefresca. Por eso también puedes comerla caliente. Dos posibilidades un una, ¡Todo un chollo! 🙂
Crema de coliflor con jamón ibérico, huevo duro y un toque de curry.
Por el contrarío, para esos días en los que todavía apetece comer caliente y de cuchara, ésta es una alternativa exquisita. Primavera es tiempo de coliflor. Como ya sabemos que no es una verdura muy querida, os proponemos esta receta diferente, sabrosa y completa que hemos encontrado en Gastronoesfera. Podría ser plato único. Aunque, eso ya depende del apetito que tengas, claro.
Tartar de jamón ibérico de bellota y yema curada.
Y para rematar, el plato con el que sorprenderás a tus comensales. Además, si eres un amante de los encurtidos con esta combinación los ojos te harán chiribitas: jamón ibérico en pequeños taquitos, pepinillos y cebolleta picados, mostaza… Parece un plato digno de un domingo de resaca, ¿verdad? Salado, avinagrado. Ummm. Pero no, no. Esto es alta cocina.
Es una receta de nada más y nada menos que el Chef Xanty Elías. Si estás ansioso por hacerla, sigue los pasos que te indican en Zouk Magazine.
Bueno, esto es todo por esta vez. ¿Qué te han parecido? ¿Nos propondrías alguna otra receta? Estamos abiertos a sugerencias, nos encanta salsear en la cocina y si encima es con nuestro jamón 100% ibérico de bellota ya… ummm ¡Irresistible! No, mejor… ¡Oh! 🙂