Llegan los calores, los sofocos, las fiestas en el pueblo, las playas abarrotadas y los atardeceres de picoteo. Llega el verano y, en Cerdoh! nos ponemos la camiseta corta y las chanclas para seguir atendiendo todos los pedidos que llegan por que, sinceramente, comprar jamón ibérico de bellota también es algo veraniego. Es más, estamos por asegurar que, parafraseando al gran Fernando Fernán Gómez, “los jamones son para el verano“.
¿Comprar Jamón Ibérico de Bellota en verano? No digáis bobadas.
Que no, hombre, que todo tiene su aquel. Por eso, vamos a ofreceros aquí unas cuantas razones de peso y con sabor por las que el Jamón Ibérico de Bellota (sea entero o en nuestros kits) puede ser la compra perfecta para acompañarte durante los calores.
Es un picoteo perfecto para esas noches de fresquito.
Ponte que llegas de trabajar (sí, en verano también se trabaja) y no tienes nada en la nevera. Pero… ¡Oh! Misteriosa salvación: tener unos loncheados de Jamón Ibérico de Bellota bien te arreglan una cena. ¿Cómo? Por un lado, puedes añadir el jamón a un salmorejo fresquito que te viene de perlas para que, en mitad de una noche de verano, apagar calores y mantener la línea. Que la piscina obliga. Por otro lado, puedes disfrutarlo sin más. Con una copita de vino y unos panecillos ligeros. Pero, eso sí, asegúrate de que lo dejas reposar un poquito a temperatura ambiente para que reabsorba todos los sabores y se ponga a punto de aceites.
Son las proteínas que necesitas para recuperar las fuerzas.
La playa cansa y lo sabes. Es un oximorón en toda regla, pero lo que debería ser una actividad relajada y un día de descanso termina provocando un agujero en el estómago de proporciones cósmicas. Pero no solo tienes hambre. También, tras tanto largo nadando de cala a cala, necesitas proteínas. Proteínas de las de verdad. De las del Jamón de bellota 100% ibérico. Proteínas que te permitan volver al día siguiente a la playa y ganar en estilo mariposa a todos los jubilados que esa playa de ensueño. Y para eso, unas buenas lonchas de Jamón Ibérico de Bellota, bien cortaditas, a cuchillo, son la solución perfecta. Y, si quieres más información puedes consultar este enlace.
Es el aliado perfecto para tu dieta de verano. Aunque ya sea tarde.
Que todos en verano hacemos, en mayor o menor medida, operación bikini, es un hecho. En Cerdoh!, de hecho, hacemos operación bikini pero siempre llegamos tarde. De hecho el bañador comienza a quedarnos bien en noviembre, justo a tiempo para ir a la piscina (climatizada). Pero esos kilitos de más, en realidad, no son culpa del jamón sino del pan. De hecho, el jamón ibérico de bellota es el complemento ideal para tu dieta. Eso sí, sin el pan.
¿Y el modo de conservación, qué?
Esta es la parte interesante: sobre todo si compras un jamón de bellota 100% ibérico entero. En los meses de verano, debido a las altas temperaturas, sobre todo en algunas partes de nuestra geografía, la conservarción de la pieza de jamón se complica un poco. Porque, si en invierno es fácil tener un lugar fresco y seco (entre 14-18ºC) en verano es más difícil. Por eso, nuestra recomendaciones para la época estival son, en primer lugar empezar el jamón por la parte más estrecha (La babilla), así se nos secará menos al tener menos superficie de corte expuesta y conservarlo en un sitio lo más fresco posible, protegido de la luz directa, y siempre por debajo de 25 ºC.
Una vez cortado lo mejor es comerlo lo antes posible, cuanto menos tiempo pase en el plato mejor, y por supuesto bajo ningún concepto calientes el plato antes de colocar las lonchas en él.
Otra buena idea es comprar en esta época el jamón cortado a cuchillo y envasado, de esta forma lo puedes conservarlo en el frigorífico y consumir el que necesites, siempre teniendo en cuenta que deberás sacarlo con 15 o 20 min de antelación, para que puedas degustarlo como es debido.
Y, al llegar a casa, poner el ventilador en modo huracán mientras saboreas el verano a través de un buen ibérico de bellota. ¿Se puede pedir más? Claro que sí, pero de momento vamos a quedarnos con la realidad 🙂